MONTECRISTI. – Vine a esta hermosa ciudad durante un recorrido por la Línea Noroeste y, entre otros lugares icónicos, llegué hasta las instalaciones de los Comedores Económicos.
Me impresionó el buen estado de su planta física y su extensa área en la avenida Mella 25 del sector Alvinar, pero es sábado y, por tanto, no hay servicio de distribución de alimentos.
Quiero auscultar su imagen y el parecer de la gente sobre sus servicios y, sin identificarme como empleado, empiezo a afilar mi perspicacia e instinto periodístico para ver “que les saco” a personas contactadas en distintos barrios.
¿Qué crees de los Comedores? ¿Cómo se beneficia de sus servicios? Entre antes y ahora, ¿qué cambios has notado?
Aunque variadas, las opiniones encarrilan en un único riel: satisfacción y encomio.
Entre las opiniones resalta el entusiasmo por la distribución gratuita de las raciones alimenticias, mejoras en la calidad y el sazón, la variedad del menú y la eficiencia de sus servidores actuales.
«La carne era antes como muela de gallinas, ahora la ponen casi todos los días», me cuenta una humilde viejita que dice desplazarse a diario hacia el Comedor desde su barrio en las afueras.
Según el Mapa de Pobreza elaborado por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, en Montecristi, el 61% de la población vive en condiciones de pobreza, el 23% en pobreza extrema y el 47.8% no tiene satisfechas sus necesidades básicas.
Estos datos explican por sí mismo la importancia de los servicios de los Comedores Económicos entre los montecristeños.
